miércoles, 1 de agosto de 2012

Seré honesta, si me da un poco de miedo


No, no creo en que el Peje sea el mejor presidente que mi país pueda tener. Lo tengo como certeza, solo hay dos cosas que tengo más claras que eso. La primera es que será durante este sexenio que inicia cuando concretaré muchos proyectos importantes de mi vida y la otra es que me asusta ver como los intereses mezquinos de algunos, nos va a llevar la chingada. Así, con todas sus letras.

Solamente aquellos que son capaz de cambiar un voto por unos pesos, y no, no me refiero a la clase que hace lo que sea por llevar un poco más de comer a su casa, sino por aquellos que tienen, y tienen tanto que la avaricia les hace querer más, son ellos los que son capaces de hacer lo que tengan que hacer para lograr el poder.


No me da miedo su desprecio generalizado por el resto de los mexicanos, me aterra la ignorancia de aquellos con los que me topo en la calle, en la escuela, en el día a día que ven de manera superficial una compleja realidad mexicana que es a todas luces un circo de muchas pistas de corrupción, de pobreza, de querer tomar ventaja sobre el jodido para joderlo aún más.

Me asustan los que ven, pero sin ver. Que ven un “triunfo” genuino donde muchos venimos observando desde hace tiempo tráfico de influencias, compromisos y compadrazgos políticos, la implantación de un modelo de políticas económicas orientados a favorecer, y brindar a los que dominan los medios tanto de comunicación como de producción.

En este México del futuro el pobre cada vez será más pobre, y el trabajador que pende de las faltas de la élite priista se congratula de saber que “hay gente que le va peor” por suerte, ellos, supieron “aprovechar las oportunidades”

Podremos estar de acuerdo o no en muchas cosas del Sr López Obrador, pero hay algo en lo que deberíamos coincidir. EPN es un presidente impuesto, no electo.

No me salen las cuentas, cuando dicen 19 millones elegimos a Peña, mientras en nuestro país 52 millones están en Pobreza Extrema. Algo no está saliendo bien. Y es hora de sentarnos a discutirlo.


¡Hazme el chingado favor!

Cortesía de Srita Free


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